Retomo lo que no debería haber abandonado. ¿O quizás sí?
Para que mis palabras no se las lleve el viento o el olvido, aquí las amarro con doble nudo de cable USB. Las enchufo al Blog y las dejo aquí por los siglos de los siglos y hasta que las nuevas tecnologías las autodestruyan.
Está bien romper con el pasado, pero sin dejarlo atrás en vano.
Cada día al despertarnos tendría que ser como limpiar el parabrisas de un coche, ahuyentando las cagaditas del camino pero dejando el cristal en medio para tener conciencia de dónde venimos y dónde estamos.
Hoy no dejo texto humorístico. Quizás no lo haga nunca, ya que no soy humorista.
Hoy no me leerá ni el tato (esto me lo escribo a mi misma, porque si alguien lo lee, entonces ya me leerá “un tato”).
Hoy, como los de Alicante: p’adelante.
Hoy me duele la puñetera rodilla.
Hoy estoy sola en casa.
Mañana será otro día.
Mañana es sábado y toca ver al de la foto :D.
Mañana descanso en el curro.
Mañana empezaré a tomar el medicamento de la rodilla.
El domingo es día de ir a misa. A mis-asuntos.
El domingo curro.
El año que viene, nadie lo ha visto.